El proyecto El Bosque establece un diálogo entre arte, ciencia, nuevas tecnologías y ecología, presentando una respuesta creativa a los desafíos ecológicos actuales y utilizando el arte como herramienta para aumentar la conciencia sobre la reforestación y la sostenibilidad. Los bosques son presentados no sólo como elementos de belleza natural, sino como complejas interconexiones que sostienen el ecosistema. La exposición comienza con una imagen digital pixelada de un bosque, que se descompone en cuadros monocromos, cada uno representando un fragmento único y simbolizando la importancia de cada elemento en el conjunto.
La finalidad del proyecto es la venta de estos cuadros y esto tiene un propósito dual: permite a los espectadores poseer una parte de la obra colectiva y, al mismo tiempo, contribuye a la reforestación del territorio de la provincia de Valencia, ya que por cada píxel vendido se planta un árbol. Este enfoque transforma la adquisición de arte en un acto de responsabilidad ambiental. Además, cada cuadro se convierte en un símbolo del compromiso con la reforestación, invitando a los visitantes a invertir en el futuro del planeta.